Ahorra en la factura de la luz este otoño. ¡Trucos sencillos!

Otoño siempre es sinónimo de vuelta a la rutina laboral, del regreso a las aulas, de nuevos propósitos para el nuevo curso… Pero también es tiempo de pelis y manta, de juegos de mesa con amigos en casa o reuniones familiares para comer algún plato típico de esta época. 

Pero a este otoño y muy probablemente al invierno, se le une esta extraña circunstancia provocada por la crisis sanitaria. Va a ser un otoño más casero de lo habitual porque muchos estarán trabajando desde casa y los estudiantes estarán turnándose entre el aula presencial y el aula virtual. Esto quiere decir que la factura de agua, gas y electricidad puede darnos algún que otro susto. 

Por eso, no nos vendría mal revisar nuestro gasto para ver en qué podemos reducir o qué es lo que puede provocar un incremento en la factura. 

Revisar los hábitos de consumo en un otoño muy casero

Este otoño-invierno debemos estar preparados para pasar tiempo en casa. No sabemos cuánto va a durar la presencialidad de la vuelta al cole, tampoco tenemos certeza de que el regreso a la oficina vaya a ser indefinido o si vivimos en una zona en la que para reducir la curva de contagios, tengamos que confinarnos. Así, vamos a recordar algunos consejos para evitar un derroche excesivo en estos meses que vamos a ver el mundo desde casa. 

Teletrabaja con los aparatos electrónicos necesarios

El pasado mes de abril la Organización de Consumidores y Usuarios cifró un crecimiento del consumo eléctrico en las viviendas de un 28%, es decir, un aumento de 10 euros en la factura mensual. Hemos empezado el otoño en una situación similar a la de entonces en lo que a contagios se refiere, por lo que muchas empresas siguen manteniendo el teletrabajo o han regresado al trabajo en remoto. Por eso hay que tener en cuenta: 

• Revisa el uso que haces de los electrodomésticos que consumen mucha energía y analiza si puedes prescindir de su uso o no utilizarlo con tanta asiduidad. 
• Conecta a la corriente solo los aparatos necesites. Si estás cargando tu smartphone, desénchufalo una vez haya completado el proceso, no dejes el cable enchufado. 
• Haz un uso inteligente del ordenador. Existen trucos fáciles para disminuir el gasto, como bajar la iluminación de la pantalla, no usar salvapantallas, apagar dispositivos que no se estén usando, como el escáner, la impresora o los altavoces. 

“Los ordenadores suponen un 7,4% del consumo de energía en los hogares según la IDAE”

Apuesta por un confort responsable  

Todos deseamos estar a gusto en casa y tener un ambiente agradable. Sin embargo, también queremos ahorrar en la factura de la luz. Más del 40% del  consumo energético en el hogar se corresponde con la calefacción y el 20% con el agua caliente. Pero como ya venimos diciendo, con pequeñas acciones podemos ver reducidos los números de la factura. 

• Mantén la temperatura adecuada y olvídate de mantener la misma las 24 horas. Por la noche puedes reducir la temperatura a los 17º y por por el día procura mantenerla en torno a los 21º. 
• Aprovecha la luz del sol. Levanta las persianas y abre las ventanas cuando el sol incida. Al caer el sol realiza la acción inversa, así mantendrás el calor acumulado y podrás retrasar los minutos de activación de la calefacción. 
• Evita calentar las habitaciones vacías y no cubras los radiadores o interpongas muebles delante de ellos porque interfieren en la distribución del calor. 
• Los electrodomésticos puedes usarlos en las franjas horarias más económicas que van entre las 22.00 – 00.00 horas. La franja más cara es la comprendida entre las 14.00 – 17.00 horas.

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Usa aplicaciones de ahorro de energía

Si crees que no eres capaz de realizar estas acciones por cuenta propia, la tecnología nos da la oportunidad de disfrutar de aplicaciones para ahorrar energía u optimizar su consumo: 

• Luz+Precio: esta aplicación te recomienda el momento idóneo para usar electrodomésticos concretos, pues controla el precio kw/h y además genera un histórico para imaginar el gasto aproximado en la siguiente factura. 

Como ves, son pequeños consejos que nos darán una alegría cuando recibamos las facturas. Al principio cuesta generar una rutina de consumo responsable, pero debemos pensar que esto no es solo un beneficio para nuestro bolsillo, sino que, además, estamos contribuyendo a un gasto más eficiente de la energía y en consecuencia, estamos haciendo un consumo responsable de los recursos naturales.