Un plan de pensiones o un plan de jubilación, ¿cuál elijo?

Plan de pensiones y plan de jubilación. En nuestro día a día nos encontramos con construcciones cuyo significado parece el mismo, pero no es así. Ya explicamos esto cuando dedicamos un post a hablar sobre las diferencias entre préstamo y crédito. 

En cuanto a los términos que nos ocupan, estos temas cada vez están más presentes en la opinión pública porque en los últimos años la edad de jubilación e incluso las prestaciones han formado parte de la agenda de los medios de comunicación. 

Diferencias entre un plan de pensiones y un plan de jubilación 

Llega un momento en el que dices “un día soy joven y al otro estoy pensando en una forma de ahorro para la jubilación”. A todos nos llega ese momento y lo mejor es tener clara cuanto antes la vía que queremos usar. 

Un plan de pensiones y un plan de jubilación así leídos parecen lo mismo, lo cierto es que tienen sus propias características y cada uno de ellos tienen un efecto significativo en la rentabilidad e incluso en las imposiciones fiscales. 

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Plan de pensiones

Muchas veces habrás oído hablar del plan de pensiones y los beneficios fiscales que de ellos se obtienen. Este es un método de ahorro e inversión voluntario ofrecido por los bancos o entidades financieras, es decir, privado. 

Se trata de un fondo de pensiones (una inversión colectiva) donde la persona va poniendo una cantidad de dinero que luego se invierte en distintos activos financieros obteniendo como meta la rentabilidad a lo largo de los años. 

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Existen planes de pensiones de distintos tipos en función del nivel de riesgo que una persona asuma. Se puede optar por un plan de pensiones de renta fija o si se quiere obtener una rentabilidad mayor elegir la vía de la renta variable. 

Con esta opción es muy complicado retirar el dinero del plan de pensiones a menos que sea por asuntos tan concretos como un accidente que repercuta en una invalidez para el beneficiario. 

Plan de jubilación

En este caso lo ofrecen las aseguradoras y no es más que un seguro de vida en el que parte de la prima se convierte en ahorro con vistas a una futura jubilación.

Existen casos en los que la rentabilidad que ofrecen los planes de jubilación puede estar garantizada pero esto no es generalizado y hay planes que no ofrecen esa seguridad. Por norma general, un plan de jubilación ofrece unos rendimientos inferiores al plan de pensiones y esto se debe a que los primeros ofrecen una rentabilidad asegurada y por tanto, más baja. Algo bueno es que con este plan el ahorrador tiene un menor riesgo. 

En el plan de pensiones hablábamos de la posibilidad de sacar ese dinero antes de tiempo, lo cierto es que en este caso no hay ninguna obligación legal más allá de atenerse a las cláusulas de la póliza. 

Una ventaja que tiene el plan de jubilación por encima de los planes de pensiones es la fiscalidad. Un plan de pensiones tiene una serie de deducciones por las aportaciones realizadas, aunque a la hora de su rescate tiene una base imponible mayor. Los planes de jubilación tienen más facilidad a la hora de ser reembolsados. 

¿Cuál de los dos elijo? 

Apostar por un plan de jubilación es lo mejor si no quieres el mínimo riesgo en tus inversiones, pero si quieres obtener un la rentabilidad extra el plan de pensiones es el adecuado. 

Ante todo, lo mejor en estos casos es sentarse y ver qué nos puede venir mejor a cada uno en función de nuestras finanzas y modos de vida. Yo lo decimos en otros post cuando hablamos de ahorro o de perder dinero. Debemos acostumbrarnos más a estudiar nuestras finanzas en profundidad e indagando en todas las aristas posibles para así actuar en consecuencia.