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¿Qué son TIN y TAE?
Con vistas a encarar la recta final de la cuesta de enero, merece la pena recapitular sobre esta época de acumulación de compras, gastos abultados y grietas en nuestra cuenta corriente.
Coincide, además, con el comienzo de las rebajas. Una oportunidad para aquellas compras que te habías dejado en el tintero o aquel capricho que tenías entre ceja y ceja para cuando bajase el precio.
Si, teniendo en cuenta ambos factores, te sientes un poco con el agua al cuello pero quieres seguir adelante a la hora de afrontar un gasto extra, quizá pretendas solicitar algún tipo de financiación.
Por eso es importante que conozcas las diferencias entre el Tipo de Interés Nominal y la Tasa Anual Equivalente, ya que te puede ayudar a evitar sorpresas desagradables.
Para que TIN y TAE no te suenen a los protagonistas de una serie de animación.
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Tipo de Interés Nominal
El TIN (Tipo de Interés Nominal) es un porcentaje que se utiliza para medir el coste de pedir prestado dinero. Suele ser fijo y representa la cantidad de dinero que recibe el banco.
Dicho de otra forma, se trata de la tasa de interés que se cobra sobre un préstamo o una inversión sin tener en cuenta los efectos de la inflación.
Más concretamente, el TIN se aplica en los contratos de préstamos o depósitos. También se utiliza a menudo como una medida estándar para comparar diferentes productos financieros.
Tasa Anual Equivalente
La Tasa Anual Equivalente (TAE) es una medida que refleja el verdadero coste de un préstamo o inversión, ya que tiene en cuenta no solo el interés nominal, sino también los cargos y comisiones asociados con el producto financiero.
La TAE es expresada como un porcentaje anual y permite a los consumidores comparar diferentes productos financieros de manera más precisa.
Este porcentaje debe considerarse referencia de lo que realmente vamos a pagar por un dinero prestado.
No solo incluye lo que le debemos al banco, sino también otros añadidos como la prima de seguro de daños anual, por poner un ejemplo.
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Diferencias entre TIN y TAE
La principal diferencia entre el TIN (Tipo de Interés Nominal) y la TAE (Tasa Anual Equivalente) es que el TIN solo tiene en cuenta el interés nominal.
La TAE, en cambio, tiene en cuenta tanto el interés nominal como los cargos y comisiones asociadas con el préstamo o inversión.
Como mencionamos antes, el TIN se refiere a la tasa de interés nominal anual que se aplica a un préstamo o inversión y es el porcentaje que se publica en los contratos de préstamos o depósitos.
Por otro lado, como decíamos, la TAE es una medida más precisa que refleja el verdadero costo de un préstamo o inversión al tener en cuenta tanto el interés nominal como los cargos y comisiones asociados.
A grandes rasgos, por tanto, el TIN es solo una parte del costo total de un préstamo o inversión, mientras que la TAE es una medida más precisa que refleja el costo total de un préstamo o inversión.
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Es importante tener en cuenta que la TAE suele ser mayor que el TIN (Tipo de Interés Nominal) debido a los cargos y comisiones añadidos.
Podemos concluir que la TAE es un indicador mucho más completo para el consumidor a la hora de conocer el coste final de un préstamo.
Según la Orden EHA/1718/2010 de regulación y control de la publicidad de los servicios y productos bancarios, los bancos están obligados a publicar la Tasa Anual Equivalente, aunque en la mayoría de los casos se incluye en la letra pequeña.
¿Cómo se traducen estas diferencias a un caso real?
Como suele ocurrir en estos casos, lo que parece complejo se entiende rápidamente con un ejemplo.
Pongamos que te dispones a comprar una televisión valorada en 900 euros y el establecimiento te ofrece una financiación a 2 meses aparentemente sin intereses.
No obstante, a la hora de realizar los pagos te das cuenta de que el desembolso total asciende a 980 euros.
Probablemente, la razón de este incremento de 80 euros en el precio final esté relacionado con algún tipo de comisión o gasto de gestión que se incluye un TAE del 8,8% y que el TIN sea del 0%.
Esperemos que esta información te haya sido de utilidad a la hora de afrontar nuevos gastos y peticiones de préstamos.
Ya sabes que nuestro compromiso contigo es total y queremos que contemples todos los factores que rodean a estas cuestiones.
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